Lando Norris conquista su primer título mundial de F1

Lando Norris conquista su primer título mundial de F1

Llegó tercero y pese a la victoria de Verstappen se aseguró la corona. Oscar Piastri terminó segundo. El británico se impuso por solo dos puntos sobre el holandés.

 

Lando Norris (McLaren) logró su primer campeonato mundial de Fórmula Uno. A los 26 años, y en su séptima temporada, se convirtió en el piloto número 35 en grabar su nombre en el cuadro honor. La noche de Abu Dhabi volvió a coronar a un monarca, en una carrera que tuvo en vilo a la afición hasta la penúltima vuelta.

 

El británico, nacido en el condado de Bristol el 13 de noviembre de 1999, no debió sufrir en Yas Marina. Sin embargo, el libro de la temporada 2025, le deparaba un capítulo más después de que su compañero y contrincante al título, Oscar Piastri, lo rebasara en la curva 9. El australiano, que pertío con neumáticos duros y Norris con medios, comenzó a presionarlo cuando este no pudo con el poleman Max Verstappen (Red Bull) en la salida.

 

Norris cruza la meta en tercer lugar asegurándose el campeonato. (Andrej Isakovic / REUTERS)
Norris cruza la meta en tercer lugar asegurándose el campeonato. (Andrej Isakovic / REUTERS)

 

La caída a la tercera posición no alteraba la definción del campeonato. Le servía para mantener la punta de la tabla ante una posible victoria del holandés. Pero Charles Leclerc (Ferrari) vio una oportunidad de atacarlo. Con DRS a su favor, presionó al McLaren durante cinco vueltas. Si Norris perdía el tercer puesto el campeonato se le escapaba de las manos, por lo que tuvo que cambiar prioridades: olvidarse de ganar la carrera y cuidarse del monegasco.

 

Por primera vez en varias carreras, McLaren trabajó con calma y no se sintieron desbordados por los imprevistos. Fue la pata que aseguró el título. Actuaron de acuerdo a las necesidades del británico. Los estrategas mantenían un ojo sobre Leclerc y otro sobre George Russell (P5). Los papaya leyeron la jugada de Mercedes cuando estos adelantaron el pit stop en la vuelta 15 —antes de la ventana para neumáticos medios—. Russell lanzó un undercut contra Norris y Leclerc para escalar dos posiciones. La reacción fue rápida, dos vueltas después ingresó Norris con Leclerc pegado a su espalda; los reflejos del muro de Woking anularon las ambiciones de Russell.

 

McLaren enfrentó el Gran Premio de abu Dhabi con dos planes de carrera bien diferenciados. La estrategia de que Norris y Piastri largaran con neumáticos difrentes, apuntaba a que Verstappen y Red Bull eligiera a uno de los papaya para luchar en las 58 vueltas. Pero el holandés, a fuerza de extender la diferencia y gestionando las gomas, pulverizó esa táctica. Aprovechó la debilidad de los McLaren con el aire sucio para cumplir con su objetivo: ganar y esperar el milagro.

 

Verstappen cubre la cuerda frustrando el ataque de Norris en la salida. (F1 / FOM)
Verstappen cubre la cuerda frustrando el ataque de Norris en la salida. (F1 / FOM)

 

No era fácil la empresa de Verstappen. Aunque triunfara, la quinta corona dependía de que Norris llegara cuarto. Y si Leclerc desplazaba a Norris, con Piastri en segundo lugar, sobrevolaba una orden de equipo: el australiano podría sacrificar el podio en favor del británico.

 

Yuki Tsunoda, en su último acto de servicio como titular de Red Bull, intentó ser tapón. Luego del primer pit stop del McLaren, se encontraron en pista. Poco pudo resistir el nipón, con neumáticos más viejos no podía contener al líder del campeonato. El rebase no estuvo exento de polémica. Tsunoda cambió varias veces la trayectoria forzando a Norris a salir de la pista, superándolo fuera de los límites. Los comisarios abrieron una doble investigación: una para determinar si el japonés incurrió en cambios de trazadas, y la otra para constatar el «track limit» del británico. Tsunoda fue penalizado con cinco segundos y Norris absuelto.

 

Pasado el susto de una penalización, la cabeza de Lando Norris y McLaren seguía puesta en Charles Leclerc. La Ferrari era una amenaza para su tercera posición y debían redoblar los cuidados. El monegasco lazó un undercut en la vuelta 40, pero Woking volvió a neutralizar la jugada llamando al británico en el siguiente giro. El camino hacia el primer título mundial se estaba allanando.

 

Verstappen tenía asegurada la victoria. Piastri, en segundo lugar, dependía de la voluntad el box si subía al podio o cederlo en favor de Norris en caso de ser superado por Leclerc.

 

Leclerc se convirtió en la mayor amenaza para Norris. (Ferrari Media Centre)
Leclerc se convirtió en la mayor amenaza para Norris. (Ferrari Media Centre)

 

Las últimas vueltas de Norris fueron coservadoras. Con el tercer puesto en el bolsillo, dejó de atacar las curvas, apenas tocaba los pianos y condujo con cautela evitando que la mala fortuna volviera a ensañarse con él. Motivos no le faltaba. En el pasado estaban la primera victoria trunca en Rusia 2021 —cuando decidió seguir con neumáticos de seco en medio de un aguacero que sorprendió en las últimas vueltas—; la desesperación en Brasil 2024 ante la remontada de Verstappen; o el choque de este año con Piastri al intentar superarlo por un hueco inexistente en Canadá.

 

Al cruzar la meta, el nuevo campeón mundial, no pudo contener las lágrimas. Fue el dasahogo por una temporada que se volvió estresante para el mundo papaya. A principios de la temporada se esperaba un paseo de los de Woking, pero terminó con el británico imponiéndose por solo dos puntos sobre Verstappen. Demasiado sufrimiento para un hombre que tuvo en sus manos el mejor coche, pero fue arrastrado a un sinfín de errores y contradicciones de su propio equipo.

 

Norris, puño en alto, en el podio de Abu Dhabi. (F1 / FOM)
Norris, puño en alto, en el podio de Abu Dhabi. (F1 / FOM)

 

Nadie puede objetar el título de Norris. Fue el más regular y resurgió con fuerza en el último tramo del campeonato. Tampoco se puede pasar por alto la temporada de Piastri. El australiano lideró gran parte del mundial hasta que una serie de reveses —con algunas decisiones polémicas de McLaren— lo despojó del liderazgo; sin embargo, renació en Catar aunque no le alcanzó para dar el zarpazo. ¿Y Verstappen? ¿Qué se puede decir? Con un coche inferior peleó como pudo la primera mitad del cameponato, y luego del receso estival comenzó un ascenso que puso en aprietos al flamante monarca.

 

Los tres ofrendaron a la Fórmula Uno un cierre a la altura de la Máxima Categoría. Solo puede haber un campeón, y ese lugar le tocó a Lando Norris. Alejó fantasmas, se reiventó en su carácter y pudo controlar las presiones. De esa pasta también están hechos los campeones.

 

 

Clasificación del GP de Abu Dhabi. (FIA)
Clasificación del GP de Abu Dhabi. (FIA)