La misma gama empleada en Monte Carlo se utilizará este fin de semana en Azerbaiyán. “Las exigencias de esta pista urbana siguen siendo relativamente bajas”, sostuvo Isola.
Pirelli anunció que los equipos contarán con las configuraciones más suave en Azerbaiyán. Destacaron que son los compuestos ideales “para el exclusivo circuito de la ciudad de Bakú, que combina la complejidad de Mónaco con las velocidades de Monza”.
“Bakú es un circuito urbano con personalidad propia, que combina rectas rápidas con algunas secciones extremadamente estrechas y técnicas, especialmente alrededor de la famosa Curva 9 en el casco antiguo de la ciudad”, afirman en el reporte difundido en el mediodía del lunes.
“Esta -agregan- es la misma selección que se hizo para Azerbaiyán el año pasado, aunque los compuestos y las construcciones son completamente nuevos para 2022”.
Uno de los retos para la configuración del 2022 es el comportamiento de los neumáticos con la temperatura del suelo. Se estima que podrían alcanzar los 50 grados centígrados “pero los estrechos confines de los edificios alrededor del circuito significan que hay áreas alternas de luz y sombra, variando bastante la temperatura de la pista alrededor de la vuelta”.
Con respecto a la estrategia, recordaron que el año pasado los equipo optaron por un solo pit stop -sin tomar en cuenta los cambios de cubiertas durante la bandera roja por el accidente de Max Verstappen a dos vueltas del final-. Sin embargo, a modo de precaución, la fábrica se cubre alegando “que la estrategia puede ser diferente este año”.
“Hasta que llegó Jeddah, Bakú era el circuito urbano más rápido del año”, recordó Mario Isola. Explicó que se optó por la misma gama de Mónaco porque “las exigencias de esta pista urbana siguen siendo relativamente bajas, ya que ninguna de las curvas consume una gran cantidad de energía de los neumáticos debido a los bajos niveles de abrasión y las cargas laterales contenidas”.
“Las altas velocidades en Azerbaiyán todavía imponen cierta exigencia a los neumáticos”, aclara el director de Pirelli Motorsport. “El punto principal -explica- tiene que ver con la tracción. Encontrar el equilibrio adecuado entre los ejes delantero y trasero es el desafío clave para todos los equipos. Es necesario tener suficiente calor en los neumáticos delanteros para generar agarre, a pesar de las largas rectas que los enfrían, pero no demasiado calor en la parte trasera; de lo contrario es fácil sobrecalentarlos en las zonas de tracción. La temperatura de la pista también es inconsistente en Bakú”.