San Marino 1994

San Marino 1994

Recuerdos de un fin de semana trágico y el dolor que sigue causando a través de los años.

 

Los días pasan consumiendo hoja por hoja del mes de Abril y, al llegar a las últimas de ellas no hay forma que la nostalgia y el dolor sacuda la emoción de los que amamos este deporte en general y  en especial a los que ya peinamos algunas canas. Y es que por más que no nos guste o quisiésemos ignorarlo no hay manera de no recordar a aquel ,que aún hoy, es considerado el fin de semana más trágico en la historia de la Fórmula 1.

Cuatro fueron los tremendos accidentes en total  que se sucedieron desde el mismísimo primer día de actividades y cuyas consecuencias fueron trágicas en dos de las ocasiones como todos recordamos, aunque bien sabemos que pudo haber sido todavía peor. Sólo un milagro hizo que una vida más no quedase trunca el mismísimo viernes 29 de Abril cuando un joven Rubes Barriclhelo estrellara su Jordan en pleno vuelo de forma lateral contra el wall rail a la salida de la variante Bassa a más de 220 km/h en las practicas libres.

Rubens salvó su vida de milagro gracias los sistemas de seguridad que, afortunadamente, venían ganado terreno desde unos años y sobre todo a la rápida acción del equipo medico, que encabezado por el recordado Sid Wotkins comenzaba así un fin de semana de arduo y triste trabajo. De aquel aparatoso impacto fue rescatado el piloto brasileño de entre hierros y fibra retorcidos, y fue el mismo Rubens quien más adelante declarara haber estado muerto por 6 minutos.

 

 

1994 San Marino Grand Prix.
Imola, Italy.
29/4-1/5 1994.
Rubens Barrichello (Jordan 194-Hart), DNQ, accident in practice, action.
World Copyright: LAT Photographic.
Ref: Colour Transparency.

Solo 24 horass más tarde, durante la clasificación del día Sábado 30 de Abril, Roland Ratzenberger, no tenia la misma “fortuna”. Los 500G del impacto a casi 300km/h de su Simtek Ford contra los muros de contención en la curva Villeneuve, fueron determinantes para apagar su vida al instante… Roland a sus 33 años de edad intentaba clasificar para largar su segundo GP de F1 y el destino se lo negó, a pesar de haber pasado años de esfuerzos y sacrificios personales para llegar a la máxima categoría “Roland: “la Historia de un Sueño”.

 

Roland Ratzenberger
Roland Ratzenberger

 

Inexplicablemente y a pesar de que varios se opusieron a continuar, el GP no se suspendió y el domingo los monoplazas se alinearon para una nueva competencia, lo cual dejó la puerta abierta para el devenir de más momentos de zozobra y tragedia, como no podía ser de otra manera la mañana del también fatídico primero de Mayo comenzó con otro aparatoso accidente en la mismísima largada cuando el Benetton de J.J. Lehto se quedó inmóvil en el quinto cajón de salida, luego de que el semáforo se pusiese en verde y fuese embestido por el Lotus de Pedro Lamy que partía desde el puesto 22 al no poder esquivarlo, la consecuencia una cantidad innumerable de restos de auto esparcidos por toda la pista y la carrera neutralizada por el auto de seguridad durante 2 vueltas, mientras la pista se limpiaba para retomar la competencia.

 

 

Ayrton Senna, Grand Prix of Pacific, TI Circuit, Aida, 17 April 1994. (Photo by Paul-Henri Cahier/Getty Images)
Ayrton Senna, Grand Prix of Pacific, TI Circuit, Aida, 17 April 1994. (Photo by Paul-Henri Cahier/Getty Images)

 

Competencia que nunca debió comenzar luego de la perdida de Roland, pero el destino estaba escrito, el más triste de los finales estaba por comenzar: el auto de seguridad apagó sus luces, se retiró de la pista y dio rienda suelta a los monoplazas, tamburello se encargó de escribir la parte final de la historia que todos conocemos, transformando al hombre en ángel, al piloto en mito y a Senna en Leyenda. Ayrton tenía en su cockpit una bandera Austríaca que pensaba hacer flamear en honor a Roland una vez finalizado el GP; pero a alguien, llámese destino, Dios o como sea, no quiso que eso sucediera y prefirió otro final.

Dos vidas se perdieron ese fin de semana hace 31 años con presentes muy distintos en aquel tiempo aunque igualmente valiosas, por eso y aunque pase el tiempo cada vez que el almanaque marque los últimos días de Abril y el primero de mayo siempre habrá un momento para recordar y derramar alguna lagrima por Roland y Ayrton.