Fue el mejor debutante del 2021, y desde el vamos, en Bahrein, consiguió demostrar su habilidad al volante. Sin embargo fue sobrepasado por su experimentado compañero Pierre Gasly y contará con su compañía en el 2022.

 

Desde la tierra del sol naciente, el Japón, Yuki Tsunoda (Alpha Tauri) desembarcó en la F1 como es ya costumbre que lo hagan los nacidos en la isla oriental. Demostró talento, tenacidad y personalidad en la pista, aunque tomó una actitud totalmente diferente fuera de la misma. Su 2021 fue un año de debut irregular pero bueno, por lo que el camino del ascenso está pavimentado. Lo espera un 2022 plagado de incógnitas, pero cuenta con su talentoso compañero, Pierre Gasly, para continuar aprendiendo.

Con grandes antecedentes en la Fórmula 2, habiendo terminado 3°, subió a la F1 junto con Mick Schumacher y Nikita Mazepin (Haas), pero terminó muy por delante de ellos en el clasificador mundial. Ya marcó una diferencia clara en su debut, en el Gran Premio de Bahrein, donde sus osados adelantamientos en la curva 1 no pasaron desapercibidos, y le permitieron posicionarse en el 9° lugar al cruzar la bandera a cuadros.

Aprovechó, durante una ciertamente caótica carrera en Azerbaiyán, para meterse por segunda vez en los puntos, mientras que su compañero firmaba el único podio del año para el equipo italiano. La primera parte del año terminó, para él, de una gran manera, puntuando también en los GPs de Estiria, Gran Bretaña y Hungría, siendo ésta última la carrera en la que sumó una de sus mejores posiciones, un 6° lugar, tras la carambola desatada por Valtteri Bottas (Mercedes) y Lance Stroll (Aston Martin) en la curva 1.

Sin embargo, desde el GP de Bélgica hasta el de Turquía inclusive, no tuvo el ritmo como para puntuar, pero un espacio tan extenso entre sus puntos no se repetiría en el resto del año. Luego de un 9° puesto en los Estados Unidos, su última carrera en Abu Dhabi tuvo la estelar llegada en el 4° puesto de Tsunoda como uno de los puntos destacados. Tanto él como su compañero adelantaron a Bottas en el famoso reinicio del final del GP, que determinaría el campeonato del mundo a favor de Max Verstappen (Red Bull)

Si bien cometió algunos errores, esperables de quien nunca ha competido en F1, demostró que llegó hasta la máxima categoría por méritos de su pilotaje, que si bien a veces se ha sobrepasado en agresividad, también logró mantener buenos duelos, por ejemplo su firme pilotaje contra Lewis Hamilton (Mercedes) o Valtteri Bottas en los Grandes Premios de Turquía y Estados Unidos.

Cuando el Alpha Tauri no estaba para puntuar, ni él ni Gasly podían sacarle jugo al AT02, pero su compañero supo aprovechar mucho mejor los Grandes Premios favorables al coche italiano, acabando por delante del nipón en 13 de las 16 carreras en las que ambos recorrieron su totalidad. Sus altercados en pista fueron respondidos con grandes descargos de ira por parte del joven Tsunoda, quien luego, fuera del coche, se comportó como un amigable competidor. Él mismo, de hecho, aclaró que sus insultos por radio son más un asunto de adrenalina que un enojo legítimo con los demás pilotos.

El 2022 será un desafío para Yuki, que por el momento sólo debe apuntar a acercarse más a Gasly en su desempeño para que Alpha Tauri no le suelte la mano; la formación de Red Bull, por el momento, no está puesta en duda. El primer paso ya está dado, ahora Tsunoda tiene por delante un difícil camino que, por lo pronto, parece tener las herramientas para recorrer.